09 de Abril de 2019
El pleito entre Frida Sofía y Michelle Salas es que, en realidad, no hay pleito ante los ojos del mundo e incluso ante los ojos de su propia familia.
Miren, lo veo como cuando a un niño chiquito se le vuela el globo que le compraron: para él es un serio problema, para el papá, la mamá y los tíos es un asunto sin relevancia, pues así lo veo. Frida Sofía aparece en sus redes sociales haciendo un escándalo mayúsculo como si su sobrina en realidad le hubiera bajado al marido o se hubieran declarado la guerra entre la familia por algo irreconciliable o algo así. ¿Cuál es la realidad? Que sólo ella entiende su problema, su molestia, su agobio, pues no existe ninguno de los antes mencionados.
Sabemos que por ahí hay un refrán que dice que “con los tuyos, con la razón o sin ella”, y si existiera algo fuerte entre estas dos mujeres, tanto Stephanie Salas, por el lado de Michelle, y Alejandra Guzmán, por el lado de Frida Sofía, seguramente ya hubieran salido en la defensa de sus respectivas hijas, pero no hay tal.
Primero fue la Guzmán, quien dijo que las amaba a todas, que era madrina de Michelle, Stephanie era su hermana del alma y que Frida Sofía era su todo. Es decir, que no le entró a la bronca y se salió inteligente y amablemente.
Por su parte, Stephanie Salas no había dicho nada, pero este fin de semana, en un evento en Los Ángeles, era la pregunta obligada y ella también optó por ser políticamente correcta al decir que la Guzmán era su hermana, que habían crecido juntas y que a Frida Sofía la adoraba, que incluso cuando Alejandra la vio embarazada fue cuando se animó a embarazarse.
Es decir que, mientras la bisabuela, doña Silvia Pinal; la abuela de Michelle, Silvia Pasquel; la hermana de esta última y mamá de Frida Sofía, y Alejandra Guzmán le dan vueltas y vueltas al asunto, Michelle Salas prefiere guardar silencio y a la única que le dejan seguir diciendo cosas y atacando es a Frida Sofía.
Lo que es un hecho es que lo que para una es un problemón, para las otras ni siquiera existe.
