04 de Marzo de 2019
Los equipos mexicanos están obligados a ganar el torneo de la Concacaf.
Algo que no entendió el Deportivo Toluca.
Cada año es más complicado levantar el trofeo y clasificarse al Mundial de Clubes de la FIFA.
Si bien Tigres perdió en la ida en Costa Rica, en la vuelta mostró su poderío ante Saprissa.
Rayados sufrió lo impensado ante un equipo salvadoreño que puso mucha resistencia.
Y Santos se llevó la eliminatoria con absoluta tranquilidad en ambos partidos.
Lo de Toluca no tiene nombre. Decepcionante y abucheado por su gente en un torneo donde tendría que haber avanzado por lo menos una ronda más.
Y ahora vienen los enfrentamientos directos contra equipos norteamericanos que, si bien están en plena pretemporada, cada vez son más complicados.
Cualquiera de los tres mexicanos debería salir airoso del torneo, pero ya nos entraron las dudas.
El Rayados contra Atlanta luce como una de las series más equilibradas.
Un poderoso equipo mexicano contra el campeón de la MLS.
México sigue siendo el gigante de la Concacaf, les guste o no les guste, pero hay que demostrarlo en la cancha.
Tigres, ya va siendo hora de trascender internacionalmente, y a Santos le urge un título continental.
Tuvimos una semana, la pasada, con altibajos.
Tigres y Santos muy poderosos, Rayados sufriendo y Toluca decepcionando.
Tuvimos grandes sorpresas como que el Independiente de Panamá eliminara al Toronto.
Viene ahora lo más interesante del evento con partidos a ida y vuelta, donde los mexicanos deben mostrar el poderío de la liga a la que pertenecen.
No se puede permitir al futbol mexicano no ganar el evento, están obligados.
Otro fracaso en Concacaf ya no sería perdonado por nadie.
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