REYNOSA, Tamaulipas.
Personal administrativo del puente internacional Reynosa-Hidalgo auxilió a los cientos de automovilistas que tuvieron que pasar un largo tiempo para poder llegar a la garita de migración e internarse a la unión americana.
El apoyo constó de agua y gasolina para aquellos que se quedaban varados en el trayecto.
En la pagina oficial de la ciudad de McAllen se pudieron mostrar diversas fotografías que daban cuenta de la atención que recibían los turistas mexicanos.
“Las lineas del puente Anzalduas están respaldadas y los empleados de Mc Allen en estos momentos están suministrando de gasolina a los automovilistas que se les esta agotando mientras esperan” cita una parte del comunicado que se encuentra en ingles.
Las filas que se han registrado en el cruce son largas y hubo un aumento con la llegada de la Semana Santa.
La espera para llegar a la garita va desde tres a cinco horas y las altas temperaturas agotan a los paseantes además de sufrir el gasto de la gasolina al verse obligados a tener encendido el aire acondicionado de su automóvil.
El viaducto Reynosa-Hidalgo se convirtió desde este martes en el mas socorrido por los automovilistas particulares luego de que las autoridades norteamericanas decidieron cerrarles el paso en el puente internacional Reynosa-Pharr.
Durante diez horas, en el día, ese puente atenderá exclusivamente al transporte de carga.
La determinación es una prueba piloto debido a las largas filas que se han registrado ante la falta de agentes aduanales y que a traído consigo perdidas millonarias que tanto Mexico como Estados Unidos están sufriendo.
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«pdg»
