06 de Febrero de 2019
Spike Lee se ha caracterizado por ser un director que gusta poner el dedo en la llaga al hablar principalmente de la discriminación y segregación que hace décadas padecieron los negros en Estados Unidos. Sus filmes hacen una crítica sobre las diferentes lecturas que puede tomar un mismo tema y los extremos en los que se puede caer.
Eso plantea en El infiltrado del KKKlan, filme en el que con su característico humor evidencia los extremos en los que caen los estadunidenses que abogan por la pureza y supremacía racial. Basada en el libro BlacKKKlansman de 2014, escrito por el agente negro Ron Stallworth, la película, con algunas licencias creativas, cuenta cómo este agente de Colorado Springs se infiltra y se hace miembro del KKKlan para conocer su manera de operar. A lo largo de 135 minutos, el espectador queda atrapado en todo momento frente a esta propuesta que deja en claro que la estupidez y los discursos radicales están adheridos a las neuronas de muchos grupos que se creen superiores a todo lo que no sea, huela o actúe como ellos. De igual forma, aunque un poco más sutil, Spike Lee evidencia los discursos de Las Panteras Negras para tomar medidas contra los blancos que los quieren reprimir.
A pesar de estar ambientada en los 70 del siglo pasado, la cinta retoma fuerza y vigencia cuando vemos cómo en EU, así como en otras regiones del mundo, la discriminación, el racismo y la xenofobia son los temas recurrentes de los que dan fe tanto los medios de comunicación como las redes sociales. Para reforzar esta idea, Lee utiliza imágenes de diversos enfrentamientos raciales, así como del presidente Donald Trump, quien alienta a hacer Estados Unidos otra vez grandioso.
Spike Lee trabajó este proyecto con dos de los hombres más relevantes de Hollywood: el productor Jason Blum y el director-productor Jordan Peele, ganador de un Oscar por el guion de ¡Huye! El elenco es clave para el filme que se estrenó en el Festival de Cannes, pues su labor, de la mano de Spike Lee, es impecable.
Lucero Calderón
Dirige: Spike Lee.
Elenco: David Washington, Adam Driver y Topher Grace.
