El Tren Interurbano México-Toluca es una obra abandonada

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CIUDAD DE MÉXICO.

¿Cómo está hoy el tren México-Toluca? En algunos tramos así, parada. Imagen Noticias recorrió los 57 kilómetros del trazo proyectado para este tren. Antes del 1 de diciembre había 10 mil 500 obreros trabajando ahí, hoy prácticamente no queda nadie.

Aquí nadie parece tener prisa ya, el ritmo del avance de obra que tuvo la construcción del Tren Interurbano México-Toluca en el último año del pasado sexenio se detuvo.

El tramo 1 corre de Zinacantepec al parque nacional «La Marquesa», en el Estado de México es el que tiene mayor avance de obra, en los patios de la terminal se observa un tren de pruebas estacionado y los trabajos en la cubierta y los andenes de la estación continúan.

Más adelante, planchas de concreto armado esperan a ser terminadas para recibir las vías del tren.

Pero en el kilómetro 28 de 57 que tiene el trayecto del tren, la obra cambia su rostro por completo y se convierte en un páramo desierto.

Las trabes que corren de manera continua desde el edificio terminal se detienen aquí, donde topan con un amparo de comuneros de San Juan Coapanoaya.

Una suspensión temporal otorgada por un juez de amparo evita trabajos en al menos 4 kilómetros de vía.

Pero 2 kilómetros más adelante, en La Marquesa, a la altura del pueblo de Salazar en el Estado de México, las cosas se ponen peor.

En las siguientes imágenes se puede ver como se veían los trabajos en el lugar hace 6 meses.

Así se ven hoy, una obra detenida, casi abandonada, otro amparo, otorgado a la comunidad de San Jerónimo Acazulco, impide el avance de obra.

Dos solitarios obreros vigilan el lugar, a unos metros, se observa un depósito de maquinaria sin utilizar, pero que cuesta.

Perforadoras, camiones, excavadoras, bulldozers, todo parado. Un cementerio que, según el último cálculo de la autoridad federal, cuesta más de 10 millones de pesos al día.

El tramo 2 es el bitunel de 4 kilómetros de longitud que prácticamente se terminó bajo la Sierra de las Cruces.

Y de ahí, el proyecto entra a la Ciudad de México, de Cuajimalpa al metro Observatorio. A la altura de las casetas de cobro de la autopista México-Toluca, un poco de movimiento parece darle vida al tren. Aquí las columnas esperan la colocación de las trabes y el nuevo puente de La Venta ya presenta un avance con respecto a lo visto 6 meses atrás.

No así en el vaso regulador Totolapan, donde se construye la estación Santa Fé.

La imagen no ha cambiado desde mayo del 2018, ocho solitarias columnas, muy pocos trabajadores en el frente de obra y ninguna evidencia de obra civil.

Y más abajo, en Observatorio, estación terminal del recorrido, los trabajos iniciales continúan como hace 6 meses.

Las perforadoras reciben una tarde más sin trabajo y un grupo de obreros, quizá el más numeroso visto en el recorrido, se dedica al armado de columnas.

La Secretaría de Comunicaciones y Transportes informó que el tren interurbano México-Toluca podría estar listo en 2 o 3 años.

Vida artificial para un proyecto anémico que, a diferencia del nuevo aeropuerto, resistió el cambio de gobierno.

La Auditoría Superior de la Federación dio a conocer hace unos días que revisó 16 contratos relacionados con la construcción del tren México Toluca y encontró un probable daño al erario por 770 millones de pesos. Tanto la Secretaría de Comunicaciones y Transportes como el gobierno de la Ciudad de México, las autoridades señaladas, tienen 30 días para responder a las probables anomalías encontradas solo en el 2017.

 

Aquí el reportaje completo:

cva





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