Paola Domínguez Boullosa – Propósito 3: sostenibilidad

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23 de Enero de 2019

 

La libertad supone responsabilidad.

                Por eso la mayor parte de los hombres la temen tanto.

                George Bernard Shaw.

 

La sostenibilidad es definida como la satisfacción de las necesidades actuales, sin comprometer la capacidad de cubrir las necesidades futuras. La sostenibilidad es una filosofía que está basada en un modo de progreso equilibrado, justo, dinámico, autocentrado, racionalmente planificado, emocionalmente consciente y sustentado. Inspirado en la biomímesis, es decir, en la vida, en lo natural… en lo auténtico, en lo esencial.

Tomar decisiones y elegir bajo este principio de sostenibilidad significa ser responsable con uno mismo, con la manera en la que vive, se cuida y se mantiene. Por lo tanto, deberá ser responsable con sus finanzas, su consumo, sus hábitos, sus habilidades y sus talentos., También, deberá ser responsable ante sus errores, sus faltas, sus fallas y de aprovechar sus áreas de oportunidad. Sin descartar ser responsable sobre sus anhelos, sus deseos y sus sueños. Elegir bajo este principio es elegir bien sobre el uso y disfrute de sus propios recursos con el fin de poder desarrollarlos e implementarlos por el mayor tiempo posible.

Sí, su vida necesita sostenibilidad, necesita estar bien administrada, necesita ser y estar bien planeada. Por eso la sostenibilidad se basa primordialmente en el respeto de su propia esencia, en el desarrollo de la mejor versión de usted mismo, en el manejo de su libertad y en su cuidado. Y la gran mayoría lo olvida…

Lo olvidan todos aquellos que no procuran su salud, los que no saben manejar sus emociones ni sus tiempos, los que asumen la autoexplotación, la esclavitud en cualquiera de sus formas y la violencia contra sí mismos. Esos… los que habitan en los excesos o en las carencias… esos que nunca saben decir no y se enfrascan en asuntos que no les corresponden, esos que no saben medir su fuerza física y mucho menos su fuerza mental, emocional y espiritual. Esos, los que no se hacen responsables de su vida, los que no piensan a mediano y largo plazo… esos, los que viven presos de su ego, los de la inmediatez, los frívolos e irrespetuosos y finalmente esos, los que no se hacen responsables de su energía vital.

La energía vital es lo que nos mantiene vivos, es la respiración: la inhalación y la exhalación, lo que se permite que entre y salga de su vida, es la renovación constante, la elección constante, la responsabilidad y el cuidado constante.

Por eso hoy le invito a elegir de manera sostenible sobre su vida, a hacerse consciente y responsable de las elecciones que hace y del porqué y para qué lo hace; a tener visión y a saber valorar y elegir lo que mejor convenga para cada etapa de su vida, porque es suya y procurarla es su mayor responsabilidad.

Recuerde que, se basa en lo esencial, en lo natural… en el inhalar y exhalar, en tener y dejar ir, en fluir, en aprovechar las oportunidades, en deshacerse de lo que ya no necesita, en mantener los pensamientos y las emociones que le permitan avanzar y en soltar todo aquello que se lo impida. La sostenibilidad es el progreso y la evolución constante, elija entonces sólo aquello que le permita trascender en las mejores condiciones y mantener su propio equilibrio. Como siempre, usted elige.

¡Feliz sostenibilidad, feliz vida!

 





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