Integrantes de la CNTE afirman que el encarcelamiento del profesor y de los activistas sociales fue una estrategia del Estado para detener sus protestas contra la reforma educativa (Foto: Especial)
OAXACA
El profesor de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), Lauro Atilano Grijalva Villalobos y los activistas sociales Leonel Manzano Sosa, Sara Altamirano Ramos y Damián Gallardo Martínez, recién liberados, agradecieron a Andrés Manuel López Obrador por cumplir su compromiso con los presos políticos.
También reconocieron a intelectuales, académicos, poetas, escritores y periodistas, por participar en el “abrupto camino por su libertad”.
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En conferencia de prensa ofrecida en las instalaciones de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), en el centro histórico de la ciudad de Oaxaca, reiteraron que su detención fue por represalia del gobierno de Enrique Peña Nieto por su oposición a la reforma educativa.
Manzano Sosa, quien durante su proceso escribió dos libros, afirmó: “siempre vi la puerta de salida de la cárcel como un sueño acaso perdido en la nada, pero la rueda de la historia pudo darme la satisfacción de ser testigo de cosas inimaginables en la historia moderna de México (la unción y gobierno de López Obrador)”.
Destacó que fueron grandes los costos y tremendos los sacrificios porque debieron pagar con cárcel su participación en el movimiento popular, para hacer “frente a la oligarquía estatal y nacional”.
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En su intervención, Lauro Atilano Grijalva Villalobos subrayó que su encarcelamiento parecía no iba a tener fin, pero gracias a la lucha de la Sección 22 del SNTE y a la CNTE, así como de organizaciones sociales y civiles, se cumplieron sus sueños de salir libres.
Posteriormente, el secretario general de la Sección 22 del SNTE, Eloy López Hernández consideró que el encarcelamiento del profesor y de los activistas sociales fue una estrategia del Estado para detener sus protestas, tras la reforma educativa.
Subrayó que los recién liberados salieron sin ser considerados culpables, porque no había pruebas para sentenciarlos.
CONTEXTO
La reciente liberación se suma a la Mario Olivera Osorio, de la Sección 22 del SNTE, en abril del 2017, también detenidos por el secuestro de dos sobrinos del empresario Gerardo Gutiérrez Candini, por las fuerzas federales en la ciudad de Oaxaca, en 2013.
Desde el 17 de mayo de 2013 hasta el viernes pasado, la CNTE exigió la liberación de los profesores, así como de los activistas integrantes del Frente Amplio de Comunidades Marginadas del Estado de Oaxaca (FACMEO).
En sus movilizaciones la gremial disidente sostuvo que las detenciones tenían un interés político de desprestigiar y criminalizar la lucha social de la sección 22 y otras organizaciones en contra de las reformas estructurales del gobierno de Enrique Peña Nieto.
Documentó que activistas y mentores fueron torturados física y sicológicamente por las fuerzas federales. Después fueron trasladados al entonces Distrito Federal, donde estuvieron incomunicados y, posteriormente presentado como presuntos secuestradores.
chg
