No cabe ninguna duda de que el León es la gran revelación del campeonato. Es el líder general de la competencia.
Se dudaba mucho de Nacho Ambriz después del interinato del torneo anterior y el presidente decidió apostar por la continuidad, lo cual le trajo grandes resultados.
León no solamente gana partidos sino que juega muy bien al futbol.
Incluso el pasado viernes igualó una histórica marca del Toluca, al ligar nueve triunfos de manera consecutiva.
Y tiene mucho mérito lo que han hecho, porque durante el camino se lesionaron jugadores importantes e incluso titulares que, de a poco, se han ido sumando al primer equipo, recuperados, como es el caso de Sambueza.
Rodolfo Cota recuperó su gran nivel, ése que ya mostró algún día en las Chivas.
En defensa Tesillo, Herrera, Equihua y Mosquera han logrado ser una barrera muy importante y coordinada para no recibir goles.
En el último partido salieron dormidos y tuvieron la mala suerte de recibir dos goles, pero en la parte complementaria se recuperaron para remontar y meter tres goles y llevarse la victoria.
Fernando Navarro sigue demostrando en cada partido que es urgente y justo un llamado a selección.
Con el joven Rodríguez, gran revelación, junto a Luis Montes, que ha recuperado su mejor forma, la mitad de la cancha está asegurada.
Ángel Mena es el mejor jugador del campeonato hasta el momento. Increíblemente, Cruz Azul lo dejó ir y ahora goza y define todos los partidos.
Y el joven Macías, que está a préstamo por parte de Chivas, difícilmente querrá irse de León cuando termine el convenio para regresar a Guadalajara.
Ambriz se ve maduro y tranquilo. Trabajando intensamente con un grupo de jugadores que nos recuerdan al León de Matosas, que en cualquier cancha era un espectáculo.
Y ya lo dijo Ambriz, que no estará contento ni satisfecho hasta que haga campeón al León.
Es la gran sorpresa, es la gran revelación, es el mejor equipo del torneo. Es un líder hecho y derecho.
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