Hoy, en nuestra gustada sección “El alcalde no tiene quien le escriba… ni lo asesore, ni le crea” les contaré la última decisión que tomó Rubén Gregorio Muñoz Álvarez y que afecta a 17 trabajadores del Organismo Operador Municipal del Sistema de Alcantarillado, Saneamiento y Agua Potable (OOMSAPAS).
Antes debo reconocer que me da pena escribir tanto del alcalde, pero en verdad, toma decisiones que políticamente no le ayudarán en su visión de lograr la candidatura a gobernador en 2021. Ahora se le ocurrió retirar la base sindical a 17 empleados del OOMSAPAS sin siquiera notificar al Sindicato de Burócratas tal decisión, la cual es arbitraria, de entrada. Ahora sí, valió barriga, señor…
Es de todos bien sabido que el Sindicato de Burócratas es uno de los más temidos, porque para bien o para mal, en cualquier conflicto defienden a capa y espada al trabajador, y en este caso, no creo que Mauricio Higuera Cota, líder sindical de la sección La Paz, desampare a los trabajadores vulnerados para terminar arrodillado ante el alcalde.
Mis fuentes me revelaron que los 17 trabajadores vulnerados en sus derechos presentarán un queja y hasta denuncia en contra del alcalde, sobre todo, porque conforme a la ley, después de transcurrir 30 días hábiles de otorgarse una base -sindical- es imposible retirarla si esta no fue impugnada; el plazo para inconformarse ante el Tribunal de Conciliación y Arbitraje venció el 1 de octubre de 2018, y el alcalde decidió retirarlas con fecha de 15 de enero de 2019.
Nos cuentan que Muñoz Álvarez instruyó a la directora administrativa del OOMSAPAS retirar las bases -sindicales- para que los empleados quedaran en categoría de confianza. Una vez que el representante del sindicato tomó nota de lo sucedido, ni el mismo director general del organismo supo qué decir porque la decisión la tomó el aspirante a candidato a gobernador en 2021 (Rubén Muñoz) sin consultarlo siquiera en el ámbito legal. ¡Asesórenlo, pues!
Los trabajadores afectados por el alcalde son: Concepción Margarito Rodríguez Cosío, Daniel Dibene Angulo, Graciela del Valle Pica, Bautista Acevedo Estrada, Rigoberto Martínez Álvarez, Cecilia Primavera Bañuelos Albañez, Ramón Uriel Alvarado Martínez, José Guadalupe Talamantes Ortega, Jesús Joel Gil Villarino, Genovevo Pérez Villalobos, Eunice Rojas Gómez, Humberto César Cannet Encarnación, Jesús Guadalupe Vega Manríquez, Miguel Ángel Miranda Murillo, Daniel Enrique Ibarra González, Arianna Higuera Estrada y Raúl Gonzalo Espinoza Ojeda.
Para poner otra mancha al tigre, el pasado 3 de enero, nos enteramos, inició el proceso de notificación de despidos en este mismo organismo. Pero eso no es lo grave, porque debemos reconocer que cada administración puede despedir a quién considere necesario siempre y cuando pague la liquidación que la ley establece y no se violen derechos laborales. Lo grave es la falta de tacto: el 4 de enero se notificó a dos mujeres, que se encontraban en periodo de lactancia, que pasarían a ser parte de las estadísticas de despidos en el OOMSAPAS; una de estas mujeres apenas regresaba de su incapacidad médica. ¡Fatal!
Al parecer el alcalde no tiene sentido común, mucho menos humano, menos aún asesores que lo instruyan a tomar decisiones políticamente sanas. Ahora, todo queda en manos del líder burócrata, Mauricio Higuera, quien deberá fajarse y defenderse de los atropellos causados por la administración que jura ser “la esperanza”.
Alcalde, usted mismo lo dijo: el pueblo da, y el pueblo quita.
