Pablo Carrillo – Modelo de negocio

0
407


07 de Mayo de 2019

 

Debo insistir en que el modelo de negocio que permitía a un grupo de empresarios tener su equipo de futbol y utilizarlo como un pasatiempo, que en ocasiones les costaba poco, ha quedado atrás, pues ahora, vientos notables de cambio, han llegado al máximo nivel del futbol nacional.

No es un tema menor que el Atlético San Luis, que en su mayoría es propiedad de la familia Gil, propietarios del Atlético de Madrid, se encuentre en la máxima división del balompié nacional. La adecuada administración y la experiencia que han adquirido en el balompié español, evidentemente que les ayudó al ascenso, lo que también representa un incremento notable en el valor de la franquicia, asunto que, evidentemente, hoy debe ser el fondo del negocio, más allá del simple hecho de pasarla bien al ser propietario de un equipo.

Está claro que el modelo sigue teniendo muchas oportunidades de mejoraría, el primer y urgente punto a cambiar es el intentar equilibrar los ingresos, para evitar que suceda lo que en la Liga de las Estrellas, donde llegó el momento en el que sólo los dos grades equipos, Real Madrid y Barcelona, tenían la capacidad y salud financiera para las grandes contrataciones, y la mayoría de los demás subsistía hundida en un mar de deudas y problemas financieros. De no hacer algo urgente por acá, muy pronto observaremos a más equipos aventando la toalla ante los enormes gastos y los limitados ingresos.

No perdamos de vista que el San Luis se trata de un nuevo jugador en el tema empresarial del balompié nacional, y que también se trata de la primera franquicia del máximo nivel en nuestro futbol que es propiedad de un consorcio español.

Por alguna razón los capitales extranjeros que se encuentran habitualmente muy activos en las grandes ligas del deporte internacional no se han acercado al futbol nacional o no se habían acercado hasta ésta incursión, que, si la observamos con detenimiento, la familia Gil realizó una inversión menor y le han pegado en seco, pues han multiplicado varias veces su inversión original de hace un par de años, en la que erogaron menos de diez millones de euros por hacerse del control del equipo potosino.

El asunto que se ratifica con la adquisición de Grupo Orlegi de la mayoría de las acciones del Atlas Futbol, es que no hay demasiados grupos empresariales con seriedad y prestigio dispuestos a entrarle al negocio de las franquicias, y algo se debe hacer, pronto y con eficacia, para revertir la constate de pocos recursos, muchos gastos y, por ende, nulo negocio. El tema debe por si solo ser lo suficientemente atractivo para darle valor a las franquicias, pero, sobre todo, hacer del nuestro un mejor futbol.

 





Source link